Ni Roberto Carlos aspirando a un millón de amigos nació con una agenda de contactos, pero pareciera que es la misión más compleja en el mundo de la producción independiente. Cómo conectarse, es para muchos la mayor incertidumbre. Hoy vine a revelarte que no existe la fórmula secreta, acá será actitud o no será nada.
El primer paso es perder la timidez. Sé abierto a generar todo tipo de contactos, no sólo los que se relacionen directamente con tu ámbito profesional. Nunca se sabe si un próximo proyecto podrá requerir de esa persona o servicio. Porque como dice mi amigo Facu, no siempre es necesario que sepas hacerlo, sino tener el teléfono de la persona indicada.
Asistí a eventos y genera conversación. Conta quién sos, a qué te dedicas. Sé estratégico y habilidoso para promocionarte y deja ver interés por los proyectos del otro. Aprovecha las herramientas del momento, la era de las redes sociales nos facilita la interacción. Si sacaste una foto o grabaste un video, pedí cuentas, etiquetá, seguí. Genera conexiones. Pero ojo, ¡Sé genuino! Busca los medios y las formas que te identifiquen.
Es importante crear conexiones profesionales, es cierto que no siempre se publican todos los puestos de trabajo. Tener un perfil prolijo y con una biografía actualizada, permite que se acerquen perfiles que se asocien con el tuyo y generar nuevas alianzas.
No es necesario que pagues un curso para conocer gente, si podes, hacelo. Pero también está buenísimo acercarte a charlas y seminarios gratuitos, inscribirte y participar en conferencias on line. Hay muchos espacios generados y muy buenos, no solo por el contenido educativo sino por la interacción que se propone entre los que participan.
También es común que salgas a buscar el contacto y vayas vagando de uno a otro hasta dar con la persona indicada. Tené paciencia, pero no tengas miedo a preguntar.
Ahora bien, acá viene lo más importante: Registra TODOS los datos. Agenda nombre de la persona, agencia, puesto, servicio y marca. Esto hará que evites la perdida de información. No confíes en tu memoria, me lo vas a agradecer. Y más allá de cualquier soporte que permita sincronizar tus contactos, desde mi experiencia puedo recomendarte que tengas un plan b. Agenda de papel a la antigua usanza, plantilla de Excel o cualquier sistema operativo que te permita exportar tus contactos. Don´t worry, los contactos pueden recuperarse. Pero tratemos de evitar tener que lidiar con esa gestión engorrosa de ser el caso.
¿Esto es todo? ¡Pues claro que no! Mantener la agenda actualizada se convertirá en un trabajo constante. Dedicale tiempo a nutrir tu agenda. Tené una comunicación frecuente y amable, escribí, visitá, sé atento. La agenda no sólo tiene que ver con guardar un contacto, la agenda son los vínculos. Hace un seguimiento. Jamás te guardes una felicitación. Y si pasa mucho tiempo sin tener un feedback, pregunta siempre si la persona con la que te comunicabas sigue estando a cargo de ese sector.
Ahora sí, antes de despedirme dejame hacerte un pedido. No te guardes el contacto, pero sé respetuoso con el manejo de la información. Avisar, preguntar y evaluar con la/las personas involucradas, tan sólo lleva unos pocos minutos y nos asegura una conexión respaldada por la confianza.
Con amor,
Aldana.